Fan fic basado en Rumpelstilkin y Belle de la serie Once Upon a Time--> "Érase una vez"
Me iba a morir y solo podía pensar en ella, en su sonrisa, en sus cristalinos diamantes, que tan solo con mirarme eran capaces de hacerme vibrar, con esa su armonía, con esa su ilusión, su afecto, su compasión, su comprensión,... Era una delicia, una que se desvanecía,... Tanto porque no me recordaba, como porque mi vida me abandonaba patéticamente... Envenenado, por el mismo que me quitó a mi mujer, por el mismo que hizo que mi hijo creciera sin su madre...¿Irónico morir lentamente por una sustancia corrosiva? Puede, porque yo, desde que sentí el poder de la magia... Cobraba su precio, siempre, como este mismo veneno, desgarrándome las entrañas... Sé que existen los antídotos y lo sé... Por ella... Ella lo fue, durante ese pequeño período de tiempo, en el que me servía,... No obstante, hubo un punto en el que supe que ella no sería una criada para mí: ¡jamás!
El dolor no podía ser más agudo, casi no podía respirar, era toda una hazaña abrir la boca para pronunciar palabra alguna, se me quebró la voz...
- Enma, por favor. Necesito... Hablar... con...ella... - extendí el brazo, con una expresión en la cara de congoja y agonía, de tales dimensiones que se vio obligada a entregarme el móvil.
- ¿De quién habla? - dijo mi hijo, extrañado.
- De su novia, tu padre tiene muchas cosas que contarte, eso es largo de contar... - decía casi indiferente mientras vigilaba el campo de fuerza mágico amenazadoramente y mi hijo se asombraba por momentos.
Marqué el número, ese que incluso ahora podría recitar, al borde de la muerte y cualquier cosa que me uniese a ella me haría resucitar unos segundos más...
Sobre todo porque no sabía si mi argucia saldría como pretendía... Sonaba el tono de llamada, un pitido, dos, tres...¡Cógelo, por favor!
Oí su respiración al otro lado del telefóno, esperé a que su voz me reprochara... y así fue:
- Señor Gold... Ya le dije que no le recuerdo...
- Ya, ya, lo sé...Lo sé, es solo que...- me costó horrores continuar - Querida, me estoy muriendo... - la escucho respirar entrecortadamente, incluso agitarse en su sitio...
- Yo... yo lo siento mucho... - dijo con sinceridad, dolorosa sinceridad.
- Yo... - respiraba cada vez peor, pero saber que era ella la que me escuchaba me ayudaba a controlar mis cuerdas vocales y ahorrar las pocas fuerzas que me quedaban, necesitaba que supiera todo lo que sentía, de modo más correcto - Yo sé que estás confusa, confusa sobre quién eres, por eso te lo voy a decir... - se me escapó, por la emoción, un temblor precoz antes de poder pronunciar lo siguiente - Eres una heroína, ayudaste a tu gente... Eres una hermosa mujer... que amó a un hombre feo... - todo me fluía directamente de mi oscuro, envejecido, dañado y envenenado corazón - Que realmente, muy realmente me amó. Encontraste piedad y honestidad, donde no había, y si no estaba, la creabas. Me hiciste regresar a la mejor parte de mí. Eso nunca había ocurrido... Así que cuando mires al espejo... y no sepas quién eres... Esa eres tú, gracias, Belle... - susurré con angustia, ya que todas estas últimas palabras iban repletas de un llanto ahogado, la emoción estuvo presente en cada sílaba.
Todo pasó tan rápido... Mis mejillas estaban llenas de lágrimas... Puede que él se pasara con ese beso la primera noche... Pero era comprensible, me quería... Y yo no recordaba nada de nada... Eso debía de ser muy doloroso... Ahora que me había dicho todo aquello... Sabía que no mentía, él era parte de mí, no sé si tal y cómo el me había dicho, o solo pretendía ligar conmigo, no lo sé... Era demasiado complicado,... Pues aquel beso me insufló un no sé qué... me gustó, pero era todo una locura, por eso me asusté ¿quién era? ¿por qué había hecho eso? Y lo que más me preocupó ¿por qué me gustó? ¿Existía alguna clase de compromiso entre él y yo? ¿Por qué me inspiraba tanta confianza? ¿Por qué adoraba su rostro? ¿Su aroma? ¿Su ligeros e imperceptibles gestos? ¿Qué por qué sé todo eso de él, solo por haberle visto y sentido sus labios sobre los míos? Ni idea, otra cosa que me horripila... ¿Por qué solo sé de desconfianza y horror? Me siento vacía, ahora, más sola que nunca, muy frustrada, no deseaba hacerle daño alguno, no... No quería que se muriera sin haber arreglado mi cabeza, mis recuerdos... Solo quería tenerle cerca, a una prudente distancia, como solía hacer cuando estaba inconsciente, sabía que nadie me haría daño con él cerca, era muy místico, muy emocional... Lo decidí, estaba muy sedada ¿y qué? No dejaría que se escapara mi única oportunidad de hacer algo... Me desprendí de todos los cables y aparatos que tenía enchufados... Me puse un traje amarillo de verano... Ese que había estado en mi taquilla desde el principio... Olía a él, lo que me hizo desprenderme del somnífero efecto que tenía sobre mí los sedantes... me puse los zapatos de tacón que lo acompañaba, di un par de pasos, casi me caigo, pero al final le cogí el tranquillo... Había una bolsa repleta de ropa y cosas que me resultaban meramente familiares, la cogí, sostuve el móvil... Solo cuando estuve fuera, cosa que logré muy fácilmente, escondiéndome solo de las enfermeras, que eran las que me conocían... Una vez fuera, me quité los tacones... Llorando corrí sin saber muy bien a dónde me dirigía...
La continuación: II - I remember