30/08/17

Proyección de anhelos e idealización: enamoramiento

  Lo ves ahí sentado, sonriendo, charlando con sus amigos, a dos, o tres mesas de ti, en la cafetería en la que trabajas, nunca te has atrevido a servir su mesa, pero cada vez que pasas a su lado tratas de escuchar de lo que hablan, de qué se ríen tan animadamente, sobre todo tratas averiguar más sobre él. Pasan los días y crees que es más y más fantástico, solo sabes que se llama Javier, que te encanta su sonrisa, sus ojos oscuros, la manera en que se coloca sus gafas sobre la nariz, que frecuenta la cafetería con sus amigos cada jueves, y a veces algún que otro día más.

  Sin querer has empezado a imaginarte a su lado, cómo sería vivir juntos, has dado por sentado que no tiene defectos, que sois tal para cual, que darías lo que fuera por ser la chica de sus sueños. 
  Así que un día te propones servir su mesa, al llegar sonríes ampliamente y preguntas con una calidez sumamente desbordante qué van a pedir, entonces algo despistada tomas nota uno por uno lo que desean, hasta llegar a él, lo miras y atenta apuntas su pedido. Te das la vuelta hacia el mostrador y no sabes si es tu imaginación pero jurarías que te ha guiñado un ojo, estás completamente roja y desde entonces no dejas de pensar en él.

 Cuando viene siempre lo atiendes, intentas mirarlo sin que te pille. Pero eres demasiado obvia, tu truco de limpiar las ventanas y mirarle por el reflejo no te hubiese fallado, si no le sacaras brillo cada vez que viene,ya que estando demasiado limpias pierden su efectividad de camuflaje, incluso se ve absurdo entre tus compañeros de trabajo, a veces bromean con que si vas a desgastarlas dejando agujeros en estas.

  Javier se percata, se abruma y un día, mientras recoges la mesa intenta ayudarte, porque quiere hablarlo contigo, pero con los nervios acabas tirando el resto del contenido de un vaso sobre tu uniforme. Te disculpas muy nerviosa, intentas recogerlo todo en la bandeja para dejar de hacer boberías en frente de él y sientes que debes huir, porque de un momento a otro se reirá de ti, cosa que no crees soportar.

No obstante espera en el mostrador a que vuelvas a salir.
Te quiere invitar a dar una vuelta por el parque y conoceros de verdad, sales antes de trabajar y vas escuchándolo mientras camináis juntos. 

Descubres muchísimas cosas que solo te atrevías a imaginar, la verdad es que algunas cosas te decepcionan, aún así te das a conocer e intentas sutilmente darle tu número para ver si surge lo que tanto has estado idealizando

Empezáis algo, pero no va como esperabas, resulta ser alguien difícil de tratar, es muy celoso, incluso inseguro, desea que lo llenes de alabanzas como solías hacer en un principio. Pero cada vez te nace menos, cada vez tu novio prefecto comienza a caer por su propio peso y te das cuenta que aquello que te gustó de él ni siquiera era real, no tenía los ojos oscuros, profundos y misteriosos que viste, no... Eran más bien castaños del montón, su sonrisa no era tan radiante, pero nunca perdiste la esperanza de que fuera como creíste que era. 

Él se cansó de llevar tanto peso sobre su persona, de "tener que ser como" y no que lo "aceptasen tal como era". Decidió romper la relación y por casualidades del destino acabó saliendo con una de tus compañeras de trabajo. 

Quedaste desolada, tuviste una mala época, te echabas la culpa, pero finalmente, después de seis meses decides que solo fue una  ilusión y no buscas complicarte la vida con relaciones, pero nunca podrás negar que Javier se quedó guardado en tu corazón y de vez en cuando lo echabas de menos y deseabas volver, pero de lo que realmente existía del Javier que tú amaste solo quedaba un vago recuerdo y una persona con su físico y personalidad cambiantes.

FIN





En realidad te enamoraste de la proyección de tus anhelos y de la idealización de una persona, debes saber que por muy doloroso que sea este sistema lo tenemos para evolucionar, madurar, crecer de los errores y vivir de las ilusiones que provocamos nosotros mismos sobre un ser que nos llama la atención, proceso que alguna vez vivirás si tienes la suerte o la desgracia, por el enamoramiento, se da al comienzo de las relaciones, luego la cosa es saber que el sentimiento de amor se desarrolle verdaderamente, porque también te pueden gustar muchos, pero no serán nada serio, las llamadas "canitas al aire" o "ir de flor en flor", cada uno vive sus emociones y vivencias como le plazca, pero mi objetivo es concenciar de algo sobre todo lo demás: NO HIERAS A OTROS POR DIVERSIÓN, TEN COMPASIÓN, SE EXPLÍCITO CON LA PERSONA EN CUESTIÓN, NO VAYAS DESTRUYENDO PERSONAS, SI ESTAS HAN COMPARTIDO PARTE DE SU EXISTENCIA CONTIGO, SE AGRADECIDO Y NO DEJES CICATRICES ALLÁ POR DONDE RONDE TU AFECTO, DEJA UNA HUELLA, QUE CON EL TIEMPO, DESAPARECERÁ, Y HABRÁS PERMITIDO QUE LA PERSONA SE RECONSTRUYA A SÍ MISMA.

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